sábado, 6 de junio de 2009

CUMBRE DE ESPLA EN LAS VENTAS


Habían pasado tres toros sin pena ni gloria, el viento condicionaba una tarde emotiva y de despedida en Las Ventas de un gran Maestro.

Apareció un cuarto toro del hierro de Victoriano del Río de nombre Beato, inmenso, largo como un tren 620 kilos en la romano y se puso a embestir por ambos pitones con suavidad y transmisión, antes se dejó sin más en el caballo eso si con la cara humillada en el peto.


Fue cuando Esplá dictó cátedra en Madrid, banderilleó en los tres pares de poder a poder, eso sí muy distintos de ejecución los tres, sobresalió un excelente segundo par.

Brindó al público la muerte del toro con la plaza puesta en pie. Empezó a TOREAR con la mano apoyada en tablas en una primera serie, luego vino la apoteosis tres tandas con la diestra cargando la suerte pasándose al toro muy cerca, y de fuera a dentro, siempre cruzado y alargando el brazo en las embestidas, eso sí es TOREAR, han tenido que pasar 30 tardes en Madrid para que se toreara de muleta a un toro.

Cogío la mano izquierda y otras dos tandas al natural de gran profundidad, la plaza era ya un manicomio, todo ello adornado con largos pases de pecho y trincherillas preciosas.


Una última serie dando los frentes al toro,que bonito y que pureza.


Se perfiló para matar en la suerte de recibir y cobró una casi entera algo atravesada y dos golpes de cruceta, era igual Espla había estado Cumbre en Madrid.

Puerta Grande de Ley ni un voto en contra, Madrid entera coreando Torero.


Se nos va un grande, y esto se queda lleno de pegapases (a excepción de dos o tres que todos sabemos quienes son, aunque tienen días y alguno esta muy venido a menos) que no saben como estar en un Plaza de Toros, y pidiendo gatitos a modo, sino que se lo pregunten a los de la Beneficicencia, y que luego los periolistos intenten decir que son toreros poderosos y pamplinas lo que tienen es mierda hasta en la penca del rabo.


Ah! se me olvidaba, los que le acompañaban en el cartel eran Morante y Castella.


2 comentarios:

Jean M. Robert dijo...

No hay que perder la fe, en los 80's la despedida de Antoñete y sus ultimas catedras fueron un revulsivo para toda la Fiesta, luego llegó Cesar Rincón.....ojala que muchos chavales hayan visto a Espla ayer.....Saludo

Anónimo dijo...

cerra, ayer un toro y un torero demostraron que otra FIESTA es posible, verdad?
Un saludo
Pgmacias